MARS

La producción de whisky ha tenido una trayectoria muy interesante en Japón durante los últimos veinte años. De hecho, en esta nación del Lejano Oriente, la epopeya de la maltería comenzó mucho antes del nuevo milenio. De hecho, desde los años 20, sobre todo en la prefectura de Osaka, era habitual dedicarse a la destilación de la malta de cebada, obteniendo productos de excelente calidad. A partir de entonces, el whisky japonés comenzó un lento pero constante ascenso, gracias también a la creación de varias destilerías que, entre los años 70 y 80, además de dedicarse a la creación de licores locales, observaron con interés la evolución del whisky escocés, tratando de captar sus secretos más ocultos para poder estar a la altura de las últimas innovaciones y técnicas. A principios del nuevo milenio se alcanzó una fecha verdaderamente histórica: en 2001, un whisky japonés fue elegido el mejor producto del mundo por el comité de los World Whisky Awards. Un verdadero momento decisivo, que marca el paso en el que el alumno, Japón, supera al maestro, Escocia. Entre las diversas destilerías japonesas que se dedican a la creación de Whisky en la actualidad, destaca Mars. Propiedad de la familia Hombo, está situada a unos 800 metros sobre el nivel del mar, entre las cordilleras del sur y del centro. Mars se dedica a la creación de whisky desde 1949, utilizando agua de los manantiales más puros de las montañas para el proceso de producción. La destilación se lleva a cabo en cuatro alambiques de cobre, que capturan la esencia de los distintos ingredientes, lo que permite crear un whisky de la máxima calidad.
La destilería produce varias etiquetas diferentes, siendo el whisky de malta único el protagonista. Sin embargo, Mars siempre está dispuesta a experimentar con nuevas etiquetas, por lo que recientemente ha lanzado un Blended Malt llamado "Cosmo".