MAILLY

La viticultura en la comuna francesa de Mailly está documentada desde el siglo XIII, y parece que los vinos producidos en esta zona, perteneciente al departamento francés de Marne, siempre han sido apreciados, siendo reconocidos y encontrados en las mejores mesas eclesiásticas y nobiliarias de la Edad Media.
Estrechamente vinculada a estas tradiciones históricas se encuentra la Maison Mailly, clasificada como uno de los Grand Crus de Champagne desde 1920. En realidad, la bodega Mailly se fundó a finales de la tercera década del siglo pasado, en 1929, como resultado de una iniciativa para hacer frente a la crisis derivada de la devastación de la Primera Guerra Mundial y del hundimiento de los mercados.
Como reacción, un grupo de viticultores decidió fundar la Maison, a la vez que comenzaba a excavar las bodegas subterráneas, que hoy se extienden a lo largo de un kilómetro. En la actualidad, los herederos de los fundadores de la cooperativa dirigen el negocio, aportando sus propias uvas a la bodega, que producen champanes únicos de la más alta calidad.
Setenta hectáreas en total, divididas en 480 parcelas, para una producción que ronda las 500 mil botellas al año: el Champagne Mailly surge de un terruño en el que el suelo donde se plantan los viñedos, rico en tiza (que tiene el mérito y la importante tarea de regular la temperatura y la humedad) juega un papel muy importante, casi fundamental, así como el cuidado y la devoción fundamentales con los que se siguen todas las prácticas entre las filas y en la bodega. Vinos refinados y elegantes, correspondientes a una gama de etiquetas que consigue satisfacer las necesidades más diversas. Entre los productos de esta fantástica maison se encuentran el "Brut Réserve", el "Brut Millésimé", el "Brut Rosé", el "Délice Grand Cru Demi sec", el "Brut Blanc de Blancs Grand Cru Exception" y muchos otros: todos ellos grandes expresiones de un magnífico territorio, exigente pero generoso si se le trata adecuadamente.