A una veintena de kilómetros al este de Verona, en la región del Véneto, se encuentra el Valle d'Illasi, atravesado por el río del mismo nombre, pero sobre todo caracterizado por un microclima particular, extremadamente adecuado y favorable para el cultivo del olivo, los frutales y la vid. En este maravilloso entorno, formado por paisajes de espléndidas colinas atravesadas por hermosos viñedos, se encuentra la bodega "Marco Mosconi", una empresa familiar que se dedica a la viticultura desde hace tres generaciones y que se dedica a la producción de vino desde 2006. Con una superficie de unas ocho hectáreas de viñedo, Marco Mosconi, propietario y gerente de la bodega del mismo nombre, ha seguido un camino de investigación cualitativa que empieza en el viñedo y termina en la bodega, con el objetivo de obtener vinos profundos, elegantes y emocionantes. Entre las hileras de vides, utilizando principalmente el sistema de formación de pérgola veronés, las vides tienen una edad media de cuarenta años y crecen en suelos de composición mixta, ricos en caliza, limo, arena y grava. Sobre todo, se cuidan siguiendo las normas de la agricultura ecológica, sostenible y biodinámica, con el máximo respeto por el entorno natural y el ecosistema. En la bodega, todos los pasos y todas las fases de trabajo se llevan a cabo con la búsqueda constante de un único objetivo, que es obtener etiquetas territoriales, personales y artesanales, es decir, botellas que sean una expresión directa del territorio del que proceden, un fiel reflejo de la personalidad de quienes las han elaborado y el resultado del máximo respeto a la tradición. Así pues, empezamos con el Soave, luego pasamos al Amarone y al Valpolicella Superiore, y terminamos con el Recioto di Soave y el Recioto della Valpolicella: el resultado son los vinos producidos por Marco Mosconi, que se distinguen por un estilo rico, potente y tenso, y por ser, como pocos, una imagen sincera y precisa de su terruño.
