COLPETRONE

Brunello di Montalcino, Vino Nobile di Montepulciano, Chianti Colli Senesi y Sagrantino di Montefalco: Tenute del Cerro -antes Saiagricola- siempre ha invertido en los mejores territorios vitivinícolas italianos, logrando combinar números con calidad.
Fundada en 1978 como empresa dedicada a la inversión en agricultura, y perteneciente al Grupo Unipol, a lo largo de los años Tenute del Cerro ha crecido respetando plenamente los valores que siempre la han distinguido. Una empresa en la que se entiende la agricultura en su sentido más noble, y que consigue cualificar cada bodega descubriendo y potenciando sus características únicas. Al fin y al cabo, no hay muchas bodegas en el panorama agrícola nacional que puedan presumir de poseer casi 5.000 hectáreas de terreno, repartidas entre tres regiones diferentes, y situadas en algunas de las zonas más prestigiosas del panorama vinícola italiano. Con más de sesenta hectáreas de viñedos, Tenute del Cerro posee en Montefalco la bodega "Còlpetrone", que se encuentra por derecho propio entre las más importantes del vasto territorio del que obtenemos nuestro Sagrantino.
Una bodega, Còlpetrone, que a lo largo de los años ha sabido imponerse al gran público gracias a vinos de gran solidez y modernidad, desde el Rosso di Montefalco hasta el más famoso Sagrantino di Montefalco. Un vino con cuerpo, potente, longevo y elegante, uno de los tintos más importantes de toda la Península. Un vino rico en taninos y polifenoles que, si se deja madurar el tiempo necesario, es capaz de devolver un perfil gustativo único en el panorama italiano.
En el viñedo el manejo es convencional, pero respetuoso al máximo del equilibrio del medio ambiente, la naturaleza y el ecosistema, y también en la bodega, bajo la supervisión enológica de Raffaele Pistucchia y aprovechando el asesoramiento de Riccardo Cotarella, todo está encaminado a exaltar la materia prima, en el signo de la mayor calidad posible.
El resultado son etiquetas que van desde el Sagrantino "Sacer" hasta el Sagrantino Passito, pasando por el Grechetto dell'Umbria, sin olvidar el Rosso di Montefalco: vinos que le permitirán descubrir el lado más auténtico de la zona de Montefalco.