CASTELVECCHI

Colle Petroso, Poggione, Madonnino: incluso los nombres de las colinas más altas de Radda in Chianti, que abrazan el pueblo fortificado de Castelvecchi a seiscientos metros de altitud, parecen remontarse a la Edad Media, al igual que las campanadas de la Pieve di Santa Maria Novella, inmersas en el sereno silencio de los olivos, parecen proceder de la Edad Media. En esta auténtica tierra de la Toscana, que se desvanece en las remotas ondas del bosque, Castelvecchi ha expresado su radical vocación por la viticultura sin concesiones: once cru, en sólo veintidós hectáreas, dibujan un mundo de raros matices enológicos.
Aquí cada planta espera el momento exacto de su cosecha, y aquí la sabiduría de los viticultores se ha embarcado en una hazaña heroica, recuperando
el inestimable patrimonio genético del antiguo viñedo conocido como "Le Madri", para devolver al paisaje y al vino, desde sus raíces, una originalidad irreproducible.
Un valor único, hábilmente realzado en la milenaria bodega abovedada de Castelvecchi, la más antigua aún activa en la Toscana, donde un precioso Chianti madura, encerrando el secreto del tiempo.