Tenuta La Ghiaia

El municipio de Sarzana está situado en el extremo oriental de Liguria: históricamente, a pesar de su pequeño tamaño, siempre ha desempeñado un papel importante en el comercio, al estar situado en una posición estratégica que le permitía comunicarse con la Toscana y Emilia Romagna. Desde la antigüedad, la ciudad ha centrado sus actividades en la agricultura, y fue también un importante centro religioso gracias a la presencia de una sede episcopal. En las afueras de Sarzana, en medio de la campiña más exuberante, se encuentra la Tenuta La Ghiaia, con una superficie de algo más de cinco hectáreas. La bodega es propiedad de la familia Lotti: Luciano, un empresario de éxito, decidió a finales de los años 60 dedicarse a la producción de vino, y compró la finca que ahora dirige su hija Olivia con amor y pasión. Además de la producción de vino, la familia Lotti también se dedica a la hospitalidad, gracias a las cinco elegantes suites que hacen que la granja se acerque a una verdadera "maison de charme", acogedora y refinada. En los viñedos de la finca, cuyo núcleo está formado por cepas de más de 40 años, se cultivan Vermentino, Sangiovese, Merlot, Vermentino Nero, Massaretta, Albarolo y Malvasia Bianca. Tanto en el viñedo como en la bodega se siguen prácticas ecológicas para preservar la naturaleza circundante, buscando siempre el mínimo impacto ambiental; en particular, en la bodega, además del acero, se utilizan tinajas de terracota vitrificada y depósitos de cemento, que favorecen el afinamiento sobre lías finas. Cada año, la finca produce unas 40.000 botellas repartidas en cinco etiquetas, donde el Vermentino tiene un papel protagonista, y se presenta tanto con Atys como con Ithaa. Tradición, selección, experiencia, calidad y pasión: estos son los ingredientes que hacen de Tenuta la Ghiaia un verdadero "laboratorio" que mira al futuro para producir vinos cada vez más naturales.