Gori

"La realización de un sueño": así es la bodega "Gori", recientemente fundada por Piero Gori, quien, impulsado por un amor incondicional a su tierra natal, a finales de la primera década de los 2000 -en 2009 para ser exactos- optó por seguir su vocación, que había permanecido durante mucho tiempo en el cajón, dando vida a una espléndida realidad vitivinícola, basada sobre todo en la unión de antiguas tradiciones y modernas tecnologías.
Pero eso no es todo: los motivos de la iniciativa de Piero Gori también están relacionados con el deseo de dedicar una atención maniática a cada etapa de la producción, respetando y protegiendo al máximo el equilibrio del medio ambiente, la naturaleza, el ecosistema y la biodiversidad.
Todo comenzó con una cuidadosa investigación dedicada al territorio y a sus peculiaridades microclimáticas, para tener sobre el papel un proyecto vitivinícola basado en datos concretos y con visión de futuro.
Nos encontramos en Nimis, en la provincia de Udine, en una zona en la que las montañas actúan como escudo contra los vientos fríos que soplan desde el norte, y en la que la proximidad a la llanura favorece importantes diferencias de temperatura entre el día y la noche, que son esenciales para que las uvas desarrollen aromas sofisticados y poco comunes.
Plantados entre 2009 y 2010, los viñedos de la bodega se plantaron con un objetivo preciso, destinado a sacar todas las mejores características del terreno y de la variedad. Para completar el cuadro, la mano del hombre añade precisión y exactitud, tanto en la realización manual de cada etapa de producción como en la selección de cada uva con extremo cuidado.
Así es como el fruto de las 18 hectáreas de viñedos de la bodega Gori se transforma, desde 2014, en la propia bodega, diseñada con vistas a la máxima funcionalidad y concebida para aprovechar la fuerza de la gravedad. Tras la vendimia, la vinificación es extremadamente escrupulosa, al igual que la crianza, el embotellado y el afinado se realizan con cuidado.
Ramandolo, Merlot y Pinot Noir, Refosco, Rosso "Meni Vasut" y Schioppettino, Chardonnay, Friulano, Ribolla Gialla y Sauvignon: en definitiva, la gama de etiquetas de Gori es variada e intrigante, de calidad impecable y capaz de satisfacer todas las exigencias. Vinos que no deben perderse.
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