Château Mont Redon

Los primeros indicios de viticultura en el sur del Valle del Ródano se remontan a la época romana, hace unos dos mil años. Se trata de un terruño con una historia increíble, que siempre se ha dedicado a la producción de grandes vinos. Aquí, más concretamente en el pequeño pueblo de Châteauneuf-du-Pape, se encuentra la sede del Château Mont Redon, una de las bodegas más antiguas de este rincón de la Provenza: de hecho, ya en 1344, "Mourredon", nombre con el que se designa el actual territorio de la finca, que entonces formaba parte de las posesiones papales, fue reconocido oficialmente como viñedo. Una finca noble, pues, que a lo largo de los siglos pasó de mano en mano a varias familias, hasta que Henri Plantin se hizo con la propiedad en 1923. Desde entonces, a través de cuatro generaciones, el Château Mont Redon ha experimentado una considerable expansión, y hoy en día posee unas 186 hectáreas, 100 de las cuales están plantadas con vides, incluidas en la famosa AOC Châteauneuf-du-Pape. Se cultivan las trece uvas permitidas por la ley para la producción de Châteauneuf-du-Pape blanco y tinto, creando un rompecabezas de variedades de uva que conviven armoniosamente en el terruño y en la botella. Château Mont Redon es una entidad dinámica, dispuesta a aprovechar las oportunidades que ofrece el mercado, como demuestran las recientes adquisiciones en Côtes du Rhône y Lirac, que contribuyen a aumentar la gama de vinos producidos cada año.