Sierra de Toloño

La bodega Sierra de Toloño toma su nombre de la meseta del mismo nombre, que domina el valle de la Rioja, salpicado de viñedos de fama mundial a lo largo del curso del río Ebro. Al norte se elevan las altas montañas de la Sierra de la Demanda, que protegen la zona de los fríos vientos del norte. Al pie de la cordillera, cerca de frondosos bosques no tocados por el hombre, se encuentran los viñedos de la bodega: a unos 650 metros de altitud, con suelos ricos en caliza y rocas, procedentes de la erosión milenaria de las montañas. Un clima mediterráneo, una exposición constante al sol y al abrigo de los vientos, junto con la influencia del clima atlántico en los días más calurosos: todos los elementos del terruño que favorecen el cultivo de la vid, con excelentes resultados. Las protagonistas son las variedades típicas, Tempranillo y Viura, que alcanzan aquí su máxima expresión varietal, combinando elegancia y potencia. Los viñedos, que suman 8,5 hectáreas, están situados entre los pueblos de Labastida y Rivas de Tereso, en la Rioja Alavesa, zona en la que se producen, junto con la Rioja Alta, los mejores vinos de la denominación "Rioja D.O.Ca. Tras un lento proceso de maduración natural, la vendimia tiene lugar en octubre, cuando el nivel de concentración de aromas y olores ha alcanzado su punto máximo. Una vez colocada la uva en la bodega, en cajas de 15 kg, y tras la fermentación, el vino se envejece en barricas o ánforas, en un proceso lento guiado por la naturaleza, con el objetivo de expresar la autenticidad de la tierra en su máxima expresión. Entre los productos de Sierra de Toloño destacan los blancos a base de Viura, Nahi y Rioja Blanco y los tintos, a base de Tempranillo, Garnacha y Graciano, como Nahi Tinto, Raposo, La Dula y Camino de Santa Cruz.