Cheurlin Dangin

En el departamento de Aube de la región francesa de Champagne, en Celles-sur-Ource, se encuentra la casa Cheurlin-Dangin. Nos encontramos en el sur de Champagne, donde desde hace diez generaciones familiares continuas, la familia Cheurlin-Dangin cultiva las variedades de uva tradicionales con las que se producen las más famosas burbujas francesas: pinot noir, pinot meunier, chardonnay y pinot blanc. Fundada en 1757, la maison lleva más de dos siglos y medio garantizando la calidad y la excelencia, con cuvées finas y refinadas. Entre las hileras de vides, el cuidado es meticuloso y escrupuloso, y cada paso de trabajo se sigue con método y rigor. Las uvas sólo se recogen a partir del cuarto año de edad de las cepas, y hay cepas en el viñedo que pueden tener hasta sesenta años. Cada temporada, el arado y el abono se realizan con el máximo respeto al medio ambiente, a la naturaleza y al ecosistema, la cosecha se realiza exclusivamente a mano y los rendimientos por hectárea se mantienen bajos y contenidos. En la bodega, tras el prensado de la uva, la primera fermentación tiene lugar en depósitos de acero inoxidable durante varias semanas, tras lo cual el vino se deja reposar y decantar durante todo el invierno. En la primavera siguiente, el proceso de espumoso comienza con una segunda re-fermentación en la botella, seguida de un remuage con un periodo más o menos largo de reposo en los pupitres, y finalmente el degüelle y la dosificación. En Cheurlin-Dangin, el proceso de producción desde la cosecha hasta el producto final requiere un mínimo de dos años, durante los cuales, sin embargo, cobran vida champagnes sencillamente extraordinarios, especialmente cuando los dos años mínimos se convierten, por ejemplo, en cinco, como es el caso de las cuvées más importantes de la maison. Champagne con nombres como "Special Cuvée", "Cuvée Christiane", "Cuvée Origance", "Cuvée Firenze", y sobre todo Champagne que, desde el Brut al Rosé, expresan los más altos estándares de calidad. Un champán que no debe perderse.