Weingut am Stein
Weingut am Stein fue fundada en 1890 por la familia Knoll en Würzburg. En ese momento, la familia se centró en la fabricación de barriles y gestionó la viticultura al margen. No fue hasta 1980, cuando la viticultura se hizo más rentable, que la familia se trasladó al pie del Würzburger Stein, sin duda el viñedo más famoso de la ciudad, una ladera orientada al sur con una altitud de 200 a 25 metros sobre el nivel del mar y una pendiente de hasta el 80%, sobre suelos compuestos por "muschelkalk", una mezcla de tiza, marga y, sobre todo, conchas fósiles, las condiciones ideales para producir un gran Silvaner. La finca de 23 hectáreas está gestionada ahora por la quinta generación, Sandra y Ludwig Knoll, que tomaron las riendas en la década de 1990. En 2005, un rediseño de la bodega hizo famosa a la pareja. Sandra y Ludwig -para romper claramente con el pasado y diferenciarse de los vinos francos de estilo barroco del pasado- levantaron una bodega con forma de cubo de diez metros por diez metros, obra de los arquitectos Hofmann Keicher y Ring. Este cubo de cristal, de arquitectura sencilla, que hace del hormigón su elemento clave y en el que no hay habitaciones -se han evitado en gran medida las puertas-, se integra perfectamente en los viñedos biodinámicos de Weingut am Stein, comunicando el estilo de la bodega, un estilo moderno y directo.La familia Knoll tiene la suerte de poseer parcelas en los mejores terruños de la región, Würzburger Stein, Stettener Stein e Innere Leiste. El trabajo en el viñedo sigue desde 2007 los principios biodinámicos, una filosofía más que una práctica agrícola para la familia Knoll, que defiende la importancia de las prácticas holísticas y de considerar siempre todo como parte de un todo mayor. Aprender a cuidar la tierra, a hacer una pausa, a observar y a dejarse guiar intuitivamente por la naturaleza fue fundamental incluso antes de aprender a utilizar 500 y 501 preparados y las diversas infusiones hechas con flores silvestres que se dejan crecer entre las hileras. En la bodega, la fermentación es espontánea y el uso de sulfitos es mínimo. La sala de la "bodega de piedra" del Weingut am Stein, donde los vinos se maduran en ánforas subterráneas y huevos de hormigón, es muy impresionante.
