LE GRAND CROS

"La historia de Le Grand Cros está estrechamente ligada a la de una pareja: Jane y Hugh Faulkner. En 1989, se enamoraron de un pequeño rincón de la Provenza. Antigua provincia del sureste de Francia, la Provenza es un lugar fascinante, tanto por su evocador paisaje como por su cocina, llena de los colores y aromas típicos del Mediterráneo, y el vino, que aquí se tiñe principalmente de rosa. Tras adquirir un terreno de 24 hectáreas al pie de las colinas de Maures, donde los viñedos crecen junto a los pinos y los olivos, los Faulkner, después de renovar una auténtica granja provenzal, pusieron en marcha Le Grand Cros. En el año 2000, su hijo Julián se unió a ellos, realizando importantes cambios tanto en el sector agrícola como en el vitivinícola para aprovechar al máximo el potencial del suelo y todo lo que ofrece el entorno, siempre mirado con respeto. Motivado por esta intención original y con el deseo de mejorar la calidad y la autenticidad de los vinos producidos, Le Grand Cros trabaja desde hace muchos años combinando la tradición vinícola y la ciencia. Como pioneros en la combinación de las tecnologías más sofisticadas con la viticultura, los productores de Le Grand Cros se han dotado de una pequeña estación meteorológica, para poder controlar con mayor precisión todas las fases importantes de la viticultura y evitar también el uso de productos químicos, así como de una cámara de infrarrojos que les permite evaluar con precisión la maduración de las uvas y planificar así mejor la cosecha. Si bien en el pasado se cuestionaba a menudo la calidad de los vinos producidos en la Provenza, el proceso iniciado hace varios años en la región para mejorar la calidad de los vinos locales, destacando no sólo los rosados sino también los tintos y los blancos, ha hecho recapacitar a mucha gente y, sin duda, la empresa Le Grand Cros, con sus productos distintivos y elegantes, ha hecho y sigue haciendo una fuerte contribución en este sentido.