Tenuta Fertuna

Estamos en el corazón de la Maremma toscana, entre las verdes colinas y los horizontes que se extienden hacia el mar Tirreno y su fascinante color azul. Aquí se levanta un anfiteatro de viñedos, diseñado por la mano del hombre con el máximo respeto al medio ambiente y a la naturaleza que lo rodea. Se trata de Tenuta Fertuna, una granja situada en Grilli, en la provincia de Grosseto.
La granja se fundó en 1997, y su nombre hace referencia a la fertilidad de esta espléndida tierra y a la suerte de los hombres que pueden dedicarse a ella con mano delicada y armoniosa, respetando un paisaje verdaderamente espléndido. Nos encontramos en una tierra rica en margas y calizas, caracterizada por un microclima mediterráneo con una fuerte influencia marina y una buena amplitud térmica entre el día y la noche. Además del legendario Sangiovese, rey indiscutible de toda la zona, las hileras de vides incluyen diversas variedades internacionales y otras -como el Vermentino- que se adaptan bien a la conformación de la Maremma. Las uvas se seleccionan a mano dos o más veces al año para garantizar la perfecta calidad de las mismas. La finca se extiende ahora por 145 hectáreas, cincuenta de las cuales se dedican al cultivo de la vid y diez al de los olivos de las variedades autóctonas Frantoio, Leccino y Moraiolo.
En la bodega, los modernos accesorios se combinan con la habitual sencillez de construcción en un proyecto de alta sostenibilidad medioambiental. Varias generaciones de viticultores y una gran experiencia han dado lugar al proyecto Tenuta Fertuna, que hoy produce siete etiquetas en las que predominan los tintos. En la cuna de la civilización etrusca, donde nada se deja al azar y todo está perfectamente armonizado con la naturaleza circundante, nacen vinos como el "Droppello", el "Lodai", el "Pactio" y el legendario "Mesiio", vinos de alta gama que siempre han sido aclamados por los expertos y los aficionados a los tintos toscanos.