Mothia

Cantine Mothia se encuentra a un paso de la isla del mismo nombre, famosa por sus salinas y el glorioso pasado del pueblo fenicio. Gracias a su ubicación estratégica y a la arquitectura del edificio que la alberga, un baglio del siglo XIX completamente renovado, la bodega se adapta bien a la acogida de grupos de turistas, incluso grandes, a los que se les ofrece una agradable e interesante visita a la bodega. La estructura en la que se encuentra la bodega se construyó a principios del siglo XX y se ha utilizado, desde la guerra y durante unos treinta años, para la entrega de uvas de los viñedos de la Reserva Natural de Stagnone y de las zonas circundantes. Hace unos años, la familia Bonomo se hizo cargo de la bodega e inició un proceso de reestructuración completa de la infraestructura y las tecnologías de elaboración. En la zona orientada al este hay una gran bodega de barricas de roble, que contiene vinos envejecidos durante más de 30 años, una reserva inestimable que representa una fuente casi inagotable de levadura. En las bodegas orientadas al sur, hay una bodega de barricas con temperatura controlada, donde se almacenan los vinos para su posterior envejecimiento. Los visitantes, a los que se les ofrece una visita completa a la bodega, también pueden visitar el atrio interior con su pavimento de mármol original, el departamento de vinificación, equipado con la última tecnología, y la sala de degustación, donde pueden disfrutar de algunos de los vinos en producción, como un Bianco y un Rosso Sicilia IGT, un Marsala Superiore DOC y otro vino de postre, por ejemplo Zibibbo, maridado con productos típicos sicilianos. Todos los vinos producidos por Cantine Mothia son siempre consistentes y equilibrados en el paladar, plenos y completos; la familia Bonomo selecciona cuidadosamente las mejores uvas, que se vinifican con esmerado cuidado y un amplio uso de la tecnología moderna, para obtener productos de gran calidad.