Larmandier-Bernier

La bodega Larmandier-Bernier es un referente indiscutible de la viticultura ecológica en la región francesa de Champagne.
Pierre Larmandier, actual propietario y director de la bodega, considera que sus vinos son el producto de su terruño y no una simple cuvée, y ha conseguido crear verdaderas obras maestras: champagnes limpios y con clase, únicos e inimitables, y una expresión total de los diferentes terruños de los que proceden. Los viñedos de la Maison Larmandier-Bernier están situados en varios municipios de la Côte des Blancs: en Vertus (Premier Cru) y en Cramant, en Chouilly, en Oger y en Avize (todas las parcelas Grand Cru). En cada uno de estos viñedos se aplican las estrictas reglas del cultivo ecológico, lo que permite a la Maison adoptar un estilo basado en la pureza y en una marcada territorialidad, en el que las vides se cultivan con rigor y método, en nombre del máximo respeto al medio ambiente y al ecosistema.
En la bodega, tras la vendimia, las uvas se prensan suavemente para obtener sólo el mosto de primer prensado, y cada parcela se vinifica por separado. Posteriormente, la fermentación alcohólica tiene lugar utilizando únicamente levaduras autóctonas, y se lleva a cabo en pequeñas barricas de roble austriaco. Finalmente, tras la fermentación maloláctica, se crean las cuvées, normalmente en el mes de julio siguiente a la vendimia. El reposo en botella de las levaduras dura varios años y, sobre todo, la dosis de azúcar es mínima.
De este modo, nacen burbujas simplemente extraordinarias. Los champagnes Larmandier-Bernier se expresan con notas afrutadas y luego ofrecen una frescura fragante, a veces salobre, mineral en boca. Elegantes y esenciales a la vez, son vinos de gran bebibilidad y, al mismo tiempo, apasionadamente intelectuales: características por las que el propio Pierre Larmandier se ha ganado la reputación de uno de los más grandes vignerons de la Côte de Blancs y más allá.