Damijan Podversic

Una realidad nacida literalmente de un sueño: esta es la bodega de Damijan Podversic, que tomó forma a partir del deseo del propio Damijan, que siempre se ha visto impulsado por el deseo de recuperar y potenciar antiguos viñedos abandonados pertenecientes a un terruño especialmente adecuado para la viticultura, como son las colinas de Gorizia. Las primeras pequeñas parcelas adquiridas por Damijan en el Monte Calvario forman ya parte de las seis hectáreas de viñedo con las que cuenta actualmente la bodega. Las variedades cultivadas son Ribolla Gialla, Malvasia Istriana, Friulano, Merlot y Cabernet Sauvignon. Además, otras pequeñas parcelas, algunas pertenecientes al abuelo de Damijan y otras alquiladas, contribuyen a la producción de chardonnay, friulano y malvasía istriana. Entre las hileras de vides se adoptan cuidadosas decisiones agronómicas y métodos naturales, con el máximo respeto por el medio ambiente y el ecosistema, de modo que todas las operaciones siguen los ritmos de la naturaleza y las fases de la luna, empezando por la siega de la hierba y la poda y terminando con la vendimia, que se realiza estrictamente a mano y en cajas, sólo cuando las uvas están óptimamente maduras. La vinificación, realizada íntegramente en madera, también sigue las fases de la luna, los ritmos lentos y la tradición, con un contacto prolongado entre los hollejos y el mosto, hasta el final de la fermentación, intercalado con bazuqueos varias veces al día. La excelente calidad y la perfecta madurez de las uvas y las semillas, combinadas con la inspirada mano de Damijan en la bodega y su conocimiento de la naturaleza y el vino, hacen que los propios vinos expresen una pureza desconcertante, revelando una intensa y definida territorialidad en nariz y paladar. La bodega también se compromete con la beneficencia con el proyecto A3: cada año un artista diferente crea etiquetas únicas para 15 botellas de 3 litros, cuyos beneficios se donan a asociaciones de ayuda a los necesitados. Corrado Zeni, Giorgio Valvassori y Shinji Ogawa son los artistas que han participado en este proyecto. De la Ribolla Gialla a la Malvasía, del Nekay al blanco "Kaplja", pasando por el Pinot Grigio y el tinto "Prelit": todos los vinos etiquetados como "Damijan" cuentan verdaderas y bellas historias, en el signo de la más alta enología.