Bonnet-Ponson

Grégoire Bonnet fue el primer miembro de la familia en producir Champagne en Chamery en 1862, tras lo cual Jules Bonnet amplió la finca e instaló una prensa de madera accionada únicamente por la fuerza humana mucho antes de que existiera la electricidad. Más tarde, sin embargo, la bodega fue desgraciadamente destruida por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, y el hijo de Jules, Raoul, que se había mudado, inició la construcción de la estructura actual. En 1956, André Bonnet, hijo de Raoul, conoció a Monique Ponson, hija de un matrimonio de viticultores de Vrigny, otro pueblo de la Montaña de Reims, y su matrimonio dio origen al Domaine Bonnet-Ponson. En su constante búsqueda de la calidad, André y Monique no sólo ampliaron el número de hectáreas que poseían en un corto espacio de tiempo, sino que también aumentaron la capacidad de la bodega, encargándose ellos mismos de los trabajos de excavación. El hijo de André y Monique, Thierry, tomó el relevo en 1979. Thierry ha estado al frente del Domaine durante 30 años, estimulando su desarrollo mediante la construcción de nuevas zonas de bodega y la incorporación de una nueva hectárea de viñedo.
Finalmente, en 2013, tras completar sus estudios de enología y trabajar como productor de vino tinto en el suroeste de Francia, Cyril Bonnet se unió al Domaine familiar. Gracias a él, el Domaine comenzó su conversión a la producción ecológica.
En la actualidad, el Domaine cuenta con algo más de 10 hectáreas de terreno, repartidas en cinco pueblos, tres de los cuales están clasificados como Premier Cru (Chamery, Vrigny, Coulommes la montagne) y dos como Grand Cru (Verzenay, Verzy).
Los viñedos de Pinot Noir, Chardonnay y Pinot Meunier se cultivan ahora de forma ecológica y el proceso de vinificación implica un contacto prolongado con las levaduras. La producción consiste en Cuvées y Millesimati de carácter y complejidad absolutos.