Veuve Clicquot

Todo comenzó en 1772, cuando Philippe Clicquot, empresario y terrateniente, fundó "un négoce de vin à l'enseigne Clicquot". Es una pequeña empresa que aspira a traspasar las fronteras para dar a conocer el nuevo nombre de Champagne en todo el mundo. En 1798, François Clicquot, hijo del fundador de la Casa, se casó con Barbe Nicole Ponsardin. Nicole Ponsardin heredó la pasión y la experiencia de su marido por la producción y la comercialización del champán, y consiguió desarrollar el negocio hasta convertirlo en una de las casas más famosas y reconocidas no sólo en la zona de Reims, sino también en la región de Champagne. Barbe Nicole Ponsardin, viuda a los veintisiete años, tomó las riendas tras la muerte de su marido, convirtiéndose en una de las primeras grandes empresarias de la historia moderna, conocida por todos como la "Viuda Clicquot", o "Veuve Clicquot", de donde procede el nombre de la propia Casa.
Bajo la dirección de la joven viuda, se obtuvieron una serie de conocimientos que beneficiaron a toda la denominación. Desde la primera añada de Champagne, elaborada en 1810, hasta el perfeccionamiento de la técnica del remuage y el desarrollo del licor de tiraje utilizado para la segunda re-fermentación en la botella, no hubo nada que no siguiera personalmente.
Sin olvidar, pues, su gran capacidad comercial, gracias a la cual Barbe Nicole Ponsardin consiguió en 1814 superar el bloqueo continental que inmovilizaba a Europa en los intercambios mercantiles, desembarcando su Champagne directamente en Rusia, en San Petersburgo, con lo que hoy se conoce no por casualidad como "cuvée Saint Petersbourg".
Una historia de excelencia, en definitiva, que hoy, bajo el signo del grupo de lujo LVMH, propietario de la Maison desde 1986, continúa gracias a unos Champagnes de personalidad única, siempre reconocibles en su inmediata elegancia y extraordinario refinamiento.