Livon

En Friuli, concretamente en la región de Collio, en esa franja extrema de tierra que divide Italia de los países del este de Europa, se encuentra la bodega Livon, una realidad que hoy en día está en la cima de la excelencia enológica no sólo en Italia, sino también a nivel internacional.
Era 1964, el año en que Dorino Livon compró su primera parcela en las colinas del Collio, a la que se fueron añadiendo otras, hasta alcanzar la superficie total de viñedo actual de 180 hectáreas. A lo largo de las décadas, la empresa Livon se ha ido consolidando, pasando por fases de crecimiento constante y continuo: en los años 80 los hijos de Dorino, Tonino y Valneo, se incorporaron a la empresa y dieron al negocio un importante cambio cualitativo, que se confirmó en la década siguiente. Sin embargo, entre los años 90 y 2000, la estrategia de la empresa siguió una política de expansión selectiva, por la que se adquirieron también fincas vitivinícolas fuera de Friuli -en Toscana y Umbría- con el fin de aumentar la competitividad en un mercado en rápida evolución.
En la actualidad, más de medio siglo después de aquel lejano 1964, los nietos de Dorino Livon, que se han incorporado activamente al negocio familiar, representan el desarrollo futuro de la bodega en nombre de la continuidad.
Los viñedos se plantan con variedades autóctonas e internacionales, y las vides se forman respetando el medio ambiente y el ecosistema. En la bodega, la filosofía de producción es lograr la máxima calidad sin concesiones.
Los vinos producidos por la bodega Livon son, en su mayoría, vinificados con pureza, intrigantes y satisfactorios, envolventes y nunca predecibles, una expresión muy representativa de su terruño.